Las Australes son 5 islas situadas al sur de la Polinesia Francesa. Sus nombres (de oeste a este) son: Rimatara, Rurutu, Tubuai, Raivavae y Rapa. Todas tienen aeropuerto menos Rapa, que sigue sin. El de Rimatara hace tan solo 5 años que se inauguró, con lo que la isla todavía permanece fuera de los packs turísticos.
¡Y tan fuera!: soy el único popa’a (turista) en el avión, y también en toda la isla porque me acabo de enterar que estaré solo en la pensión.
Este es un mapa de la Polinesia Francesa con el perfil de Europa de fondo a la misma escala. Rimatara es esa islita "al norte de Bilbao":
Rimatara es muy pequeña. Tan solo 8.6 km2 y 700 habitantes. Aparte de un clima y vegetación muy diferente a los de las islas del norte, alberga dos tesoros, dos especies de pájaros que únicamente habitan en esta pequeña miga del Pacífico: el lori de Rimatara y el carricero de Rimatara. Cuando los tenga fotografiados os haré un post. Os avanzo que el lori (un lorito) es una explosión de colores.
Al descender del avión, todo el mundo debe atravesar una columna de humo antes de entrar en el vestíbulo del aeródromo, un ritual único de este lugar remoto del Pacífico ¿por qué? pues aunque cueste creerlo en pleno siglo XXI...para espantar a los malos espíritus. Se ve que los habitantes mismos pusieron esta condición a la hora de votar si se construía el aeropuerto o no. Un ritual que también se practica cuando se llega en barco.
¿Y quién estaba en el aeropuerto finalizando una visita política a la isla? Pues mi querido Gaston Tong Sang, presidente de Polinesia y actual alcalde de Bora Bora. Sí, sí, el mismísimo presidente del país.
Esta vez fue él el que pidió hacerse la foto conmigo. A mí me caía la baba, y a la gente del aeropuerto, de repente, le cambió el semblante. ¿Quién sería este personaje con el que el presidente quería hacerse una foto? Era la atracción de todas las miradas.
También estaba George, el amo de la pensión y ex-alcalde de la isla durante 12 años consecutivos. Bajo su mandato se construyó el aeropuerto, en 2006. Le costó 15 millones de euros. George y su mujer Claudine regentan la única pensión de Rimatara, la pension Ueue.
George habla como un gran jefe tribal: frases cortas y contundentes: poisson bon! Vin rouge, bon! Demain, baleines! Es muy agradable. Hoy para cenar me saca un “vino español”. Alucino: un tetrabrick de tintorro Zumouva. Nos bebemos tres copas. Peleón peleón. Yo ya estoy medio piripi...o sea que mejor lo dejo aquí, que mañana tengo que fotografiar el lorito.
Too to maitai (o sea, bona nit en rimatariano)
Too to maitai (o sea, bona nit en rimatariano)
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